domingo, 12 de diciembre de 2010

Lo que no nos dijeron de chiquititas: dejarlo ser

Domingo a la tarde, después de una comilona por el cumple de papá. Me tiro en el sillón y busco una comedia romanticona para ver (le estuve metiendo duro a las pelis de terror y necesito que la gente se quiera y que que termine poseída por el Diablo). Encuentro esta: "He's just not that into you" (Ver trailer con subtítulos, perdón por la calidad). La sinopsis dice algo de "las relaciones a los 30" así que compro porque todo lo que dice "30" me atrae.

Play. Y arranca y compré. Me quedo viéndola. Obviamente una película que habla de amor. De los que están solos, de los que están en pareja, de los que están casados, de los que quisieran, de los que no quisieran. Lejos de querer ser una crítica de cine o fan de la película, me hizo pensar en algunas cosas: Eso de que "hay que" estar en pareja o "hay que" casarse y tener hijos. "hay que" ser exitoso, ¿funciona?. La respuesta obvia es: No.

Me dirán, "che, ¿sos tan genia que recién ahora te das cuenta que no funciona?" No, claro que desde hace un tiempo que lo pienso pero recién ahora estoy dejándolo funcionar. Soy chica de barrio. Crecí jugando a la mamá y al papá, a que la gente se mira a los ojos, se agarra de la mano y se ama para siempre. Que en el medio nada más. Que eso es ser feliz. Y la verdad estuve muy equivocada. Veo parejas casadas que buscan algo más afuera, veo gente sola tan feliz que contagian, veo personas que se sienten plenas detrás de su computadora en la oficina, veo gente que sonríe sin pensar en su futuro, y veo otras que no pueden parar de planificarlo. El pasto no es más verde en otro jardín. Es sólo pasto. Y me olvido a veces de regar el mío...¡y tan sólo es eso!

Creo que a veces empujo las cosas para que todo suceda. Una vez lo hice tan obvio, que lo empujé tanto, tanto, que lo tiré pá juera. A veces me es difícil "dejarlo ser" porque me da miedo no saber para donde va ir eso a ser dejado ser. Entonces por miedo, uno va poniendo bloquecitos y encauzando su río hacia la mar. El río avanza por la ruta que le marcaste. Pero es falso. No sirve, tarde o temprano esa represa va a mostrar grietas. Podrán arreglarse, o no. Hay que dejarlo ser. Y en un pacto conmigo misma, me prometí no tirar más de los pelos nada: dejalo ser, y si no vuelve..."he may not be that into you". Él, ella, ese trabajo nuevo, la relación con tu flia. No hablo sólo de una pareja.

No es lo mismo echarse y no hacer nada. No. Che, no estoy diciendo eso. Siempre digo que "hay que dejar que las cosas pasen, sin dejar de hacer pasar las cosas". Lo que estoy diciendo es que de alguna manera, todo es más sencillo de lo que hasta hoy pensaba.

Mujeres, hombres, nenes, grandes, todos buscamos lo mismo: felicidad. Entonces, de alguna manera mágica, de alguna manera astronómicamente controlada, de alguna manera destinal, las cosas que te hagan bien, tranquilo, van a terminar pasando. Sólo, como decía Paul, hay que dejarlo ser. Una nueva pista (tonta y obvia...I know!): Todos queremos ser felices. Todos encontramos o encontraremos a quien busque ser feliz de la misma manera que uno.

Todos en este universo mágico, astronómico y destinal volamos solitos y cada tanto, cada muy tanto, nos toca un lindo copiloto volando con nosotros. Dejate llevar por el viento. Volemos juntos por este rato y veamos como nos va.